Y llegamos al punto de hablar acerca de mi afinidad por la escritura, y mis comienzos en las letras.
Yo hace mucho tiempo 2002 para ser exactas me uni a un sitio online llamado Quizilla, lastima que ahora es parte de Nick
Y ahí escribía todo lo que se me ocurría, ahora lo que vamos a hacer es dejarles un link:
http://quizilla.teennick.com/user/Siryuki/profile
Ahí deberían estar todas las historias mias, escritas en ingles, por que si: Aceptemoslo, antes escribía en ingles por que AMO LA LITERATURA INGLESA!
Y al que no le guste que se tape los ojos y no lea mas xD.
Así que como entrada de esta deleitable comida les ofrezco un prefacio de un set de historias cortas que hace algún tiempo (ya mucho empecé a escribir) Tratare de traducirlo lo mejor que pueda :)
Cabe aclarar que de yo (Sabrina H.) Soy la autora xD y que esta totalmente prohibido llevarse esta historia o hacerla pasar como suya.
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"Cuentos de Hadas retorcidos" - Prefacio
Sentado en la esquina había un hombre en mal estado, que no era alto ni bajo. Ni gordo ni delgado. Solo un hombre común y corriente que no tenia secretos. O por lo menos eso era lo que pensábamos. Su nombre es Julious, y había sido el guardián y cuidador de la biblioteca hace ya demasiado tiempo, demasiado inclusive que ya nadie recordaba, hace cuanto había llegado ahí.
Nos saludo con una expresión tranquila y serena que se veía reflejada en sus ojos. Dicen que los ojos son las puertas del alma, pero los ojos de Julious no lo eran. Quizás los ojos y las imagenes reflejadas sobre ellas son solo espejismos, formas que la otra persona quiere que veamos.
La mirada de Julious eran como dos pozos profundos, llenos de pensamientos, sentimientos y misterio.
"Hola chicos, en que los puedo ayudar hoy?" Nos pregunto.
"Buenos días! Sr Julious" Cassey mi hermana pequeña exclamo. "Me gustaría un cuento de hadas" dijo. Cassey era la mas pequeña de todas mis hermanas, es mas era mi única hermana. Tenia cinco años, sus ojos eran azules, sus mejillas rosas, su cabello rojo como el fuego y una sonrisa que mostraba sus dientes blancos, tal como cualquiera de su edad fuera.
"No queremos!" Tomas y Nathan dijeron en unisono. "Queremos un libro de Misterio!".
Yo solamente sonreí, me gustaba escucharlos hablar al mismo tiempo, eran gemelos y para mi era natural.
"No! Quiero mi libro de hadas!" Cassey dijo, lágrimas comenzando a formarse entre sus ojos.
Senti el ambiente cambiando en la biblioteca, si no hacia algo seguramente Cassey empezaría a llorar y los gemelos a pelearse entre si.
"Que tal un libro de romance?" propuse. A lo cual los tres respondieron a coro: "NO!"
"Esperen un segundo." Julious nos dijo. "Tengo el libro indicado para los cuatro." Al decir eso se levanto de la silla en la cual había estado todo este tiempo y entro a un cuarto. Luego de haber transcurrido algún tiempo, salio y entre sus manos traía un libro grande, recubierto en cuero e impreso con letras doradas.
"Woooaaaahh" los gemelos dijeron al unisono nuevamente, una vez que el Sr. Julious dejo caer el libro sobre la mesa, y en toda la biblioteca se escucho el golpe contra la mesa.
"Esto queridos niños, es el libro por el cual han estado buscando. Es un cuento de hadas, una historia de misterio y claro un libro romántico, todo en uno!. Ha estado aquí hace ya algún tiempo, e inclusive recuerdo que me lo leyeran cuando yo era joven como ustedes." Julious nos dijo, con una sonrisa burlona que se reflejaba en su cara.
"Pero nunca lo leíste tu? otra vez?" Pregunte curiosa.
"Querida, alguien te lo tiene que leer, sino no funciona. Así que les gustaría que empiece?" Julious pregunto.
Cassey me miro, y yo mire a los gemelos que me miraban fijo, implorando que diga que si. No les podía denegar tal placer.
"Bueno, continua!" Dije y me senté en el piso. Sin antes mirar la tapa del libro.
"Cuentos de Hadas retorcidos"
Y cuando la tapa se abrió, toda mi vida cambio.
Nos saludo con una expresión tranquila y serena que se veía reflejada en sus ojos. Dicen que los ojos son las puertas del alma, pero los ojos de Julious no lo eran. Quizás los ojos y las imagenes reflejadas sobre ellas son solo espejismos, formas que la otra persona quiere que veamos.
La mirada de Julious eran como dos pozos profundos, llenos de pensamientos, sentimientos y misterio.
"Hola chicos, en que los puedo ayudar hoy?" Nos pregunto.
"Buenos días! Sr Julious" Cassey mi hermana pequeña exclamo. "Me gustaría un cuento de hadas" dijo. Cassey era la mas pequeña de todas mis hermanas, es mas era mi única hermana. Tenia cinco años, sus ojos eran azules, sus mejillas rosas, su cabello rojo como el fuego y una sonrisa que mostraba sus dientes blancos, tal como cualquiera de su edad fuera.
"No queremos!" Tomas y Nathan dijeron en unisono. "Queremos un libro de Misterio!".
Yo solamente sonreí, me gustaba escucharlos hablar al mismo tiempo, eran gemelos y para mi era natural.
"No! Quiero mi libro de hadas!" Cassey dijo, lágrimas comenzando a formarse entre sus ojos.
Senti el ambiente cambiando en la biblioteca, si no hacia algo seguramente Cassey empezaría a llorar y los gemelos a pelearse entre si.
"Que tal un libro de romance?" propuse. A lo cual los tres respondieron a coro: "NO!"
"Esperen un segundo." Julious nos dijo. "Tengo el libro indicado para los cuatro." Al decir eso se levanto de la silla en la cual había estado todo este tiempo y entro a un cuarto. Luego de haber transcurrido algún tiempo, salio y entre sus manos traía un libro grande, recubierto en cuero e impreso con letras doradas.
"Woooaaaahh" los gemelos dijeron al unisono nuevamente, una vez que el Sr. Julious dejo caer el libro sobre la mesa, y en toda la biblioteca se escucho el golpe contra la mesa.
"Esto queridos niños, es el libro por el cual han estado buscando. Es un cuento de hadas, una historia de misterio y claro un libro romántico, todo en uno!. Ha estado aquí hace ya algún tiempo, e inclusive recuerdo que me lo leyeran cuando yo era joven como ustedes." Julious nos dijo, con una sonrisa burlona que se reflejaba en su cara.
"Pero nunca lo leíste tu? otra vez?" Pregunte curiosa.
"Querida, alguien te lo tiene que leer, sino no funciona. Así que les gustaría que empiece?" Julious pregunto.
Cassey me miro, y yo mire a los gemelos que me miraban fijo, implorando que diga que si. No les podía denegar tal placer.
"Bueno, continua!" Dije y me senté en el piso. Sin antes mirar la tapa del libro.
"Cuentos de Hadas retorcidos"
Y cuando la tapa se abrió, toda mi vida cambio.
(27-6-08)
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